Anubis
Anubis, la fragancia protectora de la serie "Dioses de Egipto", es una combinación de esencias de Anubis, Ambar Real, Canela e Incienso Blanco. Cada uno de estos elementos ha sido cuidadosamente seleccionado para brindarte una experiencia única.
El Ambar Real es conocido por sus propiedades curativas y su capacidad para equilibrar las emociones. La canela, por su parte, ha sido utilizada por siglos por sus propiedades estimulantes y su aroma cálido y acogedor. Por último, el Incienso Blanco, que ha sido utilizado en ceremonias religiosas por milenios, es conocido por su capacidad para fomentar la relajación y reducir la ansiedad.
Además, Anubis te ofrece una protección misteriosa gracias a su esencia de Anubis, el dios egipcio protector de los muertos. Esta fragancia te ayudará a revertir esos momentos en donde la mente nos agobia y nos hace ver todo de forma negativa. En lugar de ello, Anubis te permitirá conectar con el optimismo y la alegría, permitiéndote disfrutar de la vida con más plenitud.
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Anubis
Misteriosa Protección
Anubis es una de las deidades más antiguas de la mitología egipcia, su imagen es la de un hombre con cabeza de chacal o de perro. Se cree que fue adorado desde el período Predinástico, es decir, desde antes del año 3000 a.C. Su culto se extendió por toda la región del Nilo y se mantuvo vigente durante muchos siglos.
La figura de Anubis estuvo estrechamente relacionada con el proceso de momificación de los egipcios. Se creía que él era el encargado de proteger a los muertos en su camino hacia el más allá, por lo que su imagen estaba presente en las tumbas y templos funerarios. Se le consideraba el guardián de las necrópolis y el encargado de pesar el corazón de los difuntos en la balanza de la justicia.
Anubis era el hijo de Osiris y Nephtys, dos deidades importantes del panteón egipcio. Su nombre en jeroglíficos se escribía como "Anpu" y su culto tuvo su apogeo durante el Imperio Antiguo. Se creía que él guiaba a las almas de los muertos hasta el juicio final, en el que se decidía si eran merecedores de la vida eterna.
La figura de Anubis se relacionaba con la magia y la protección. En algunos templos se le representaba como el protector de los faraones y se le consideraba el encargado de alejar a los malos espíritus. Además, se creía que él tenía la capacidad de curar enfermedades y aliviar dolores.
Anubis también fue asociado con la luna, y se creía que su imagen reflejaba la luz del satélite en las noches más oscuras. Su nombre en algunos textos antiguos se traduce como "Aquel que está sobre su montículo", lo que se interpretaba como una referencia a la colina en la que se situaba su templo.
Los templos de Anubis se encontraban en varias partes de Egipto, pero uno de los más importantes estaba en la ciudad de Abidos. Allí se celebraba una importante fiesta en honor a la deidad, en la que se realizaban ofrendas y sacrificios en su nombre.
En la actualidad, la figura de Anubis sigue siendo objeto de fascinación y admiración. Su imagen aparece en numerosas obras de arte y su figura ha sido llevada a la cultura popular en diversas ocasiones. Con Anubis, puedes sentir la misteriosa protección de esta deidad egipcia y disfrutar de las bondades del ambar real, la canela y el incienso blanco.